Es la facultad del consumidor de dejar sin efecto el contrato celebrado, notificándolo al vendedor en el plazo establecido para el ejercicio de ese derecho, sin necesidad de justificar su decisión, sin penalización de ninguna clase y sin gasto alguno para el consumidor y usuario.
El consumidor y usuario dispondrá de un plazo de 14 días naturales para ejercer este derecho, que se computará desde la recepción del bien objeto del contrato o desde la celebración de éste si su objeto fuera la prestación de servicios.
Cuando el consumidor y usuario haya ejercido el derecho de desistimiento, el comercio online estará obligado a devolver las sumas abonadas por este sin retención de gastos y sin demoras indebidas, en cualquier caso, antes de transcurridos 14 días naturales desde la fecha en que haya sido informado de la decisión de desistimiento por el consumidor y usuario.
La devolución del dinero que te realicen debe incluir los gastos de envío que pagaste. Otra cosa es que al ejercer el derecho la empresa te reclame que tú pagues los gastos de envío de volver a enviar el producto de vuelta.
El usuario deberá remitir al nombre y dirección de la persona que figure en la página web para ejercer este derecho indicando los datos de identificación del contrato y de los contratantes a que se refiere.
Algunas excepciones al derecho de desistimiento:
Una vez transcurrido el período del derecho de desistimiento entramos en un segundo escenario. El usuario podrá reclamar por el producto e incluso devolverlo pero deberá haber algún tipo de desperfecto. Es la garantía.
Los productos adquiridos a través de una tienda online se regirán por el régimen de garantías en la venta de bienes de consumo.
La garantía en la compra de un artículo nuevo es de dos años, sea cual sea el canal a través del cual se adquiera.
Las garantías a las que tiene derecho el consumidor se aplicarán tanto a productos nuevos como de segunda mano, si bien estos últimos cuentan con alguna particularidad, como es el plazo máximo de un año en defecto de pacto entre comprador y vendedor. En todo caso, el consumidor tiene derecho a recibir un producto en perfecto estado.
La reparación y la sustitución serán gratuitas para el consumidor. Comprenderán los costes necesarios para subsanar la falta de conformidad de los bienes con el contrato, especialmente los gastos de envío así como los relacionados con la mano de obra y los materiales, y se llevarán a cabo en un plazo razonable. Mientras que el producto permanezca en el servicio técnico del vendedor (que puede ser el del fabricante) se suspende el cómputo del tiempo de la garantía.
Es la facultad del consumidor de dejar sin efecto el contrato celebrado, notificándolo al vendedor en el plazo establecido para el ejercicio de ese derecho, sin necesidad de justificar su decisión, sin penalización de ninguna clase y sin gasto alguno para el consumidor y usuario.
El consumidor y usuario dispondrá de un plazo de 14 días naturales para ejercer este derecho, que se computará desde la recepción del bien objeto del contrato o desde la celebración de éste si su objeto fuera la prestación de servicios.
Cuando el consumidor y usuario haya ejercido el derecho de desistimiento, el comercio online estará obligado a devolver las sumas abonadas por este sin retención de gastos y sin demoras indebidas, en cualquier caso, antes de transcurridos 14 días naturales desde la fecha en que haya sido informado de la decisión de desistimiento por el consumidor y usuario.
La devolución del dinero que te realicen debe incluir los gastos de envío que pagaste. Otra cosa es que al ejercer el derecho la empresa te reclame que tú pagues los gastos de envío de volver a enviar el producto de vuelta.
El usuario deberá remitir al nombre y dirección de la persona que figure en la página web para ejercer este derecho indicando los datos de identificación del contrato y de los contratantes a que se refiere.
Algunas excepciones al derecho de desistimiento:
Una vez transcurrido el período del derecho de desistimiento entramos en un segundo escenario. El usuario podrá reclamar por el producto e incluso devolverlo pero deberá haber algún tipo de desperfecto. Es la garantía.
Los productos adquiridos a través de una tienda online se regirán por el régimen de garantías en la venta de bienes de consumo.
La garantía en la compra de un artículo nuevo es de dos años, sea cual sea el canal a través del cual se adquiera.
Las garantías a las que tiene derecho el consumidor se aplicarán tanto a productos nuevos como de segunda mano, si bien estos últimos cuentan con alguna particularidad, como es el plazo máximo de un año en defecto de pacto entre comprador y vendedor. En todo caso, el consumidor tiene derecho a recibir un producto en perfecto estado.
La reparación y la sustitución serán gratuitas para el consumidor. Comprenderán los costes necesarios para subsanar la falta de conformidad de los bienes con el contrato, especialmente los gastos de envío así como los relacionados con la mano de obra y los materiales, y se llevarán a cabo en un plazo razonable. Mientras que el producto permanezca en el servicio técnico del vendedor (que puede ser el del fabricante) se suspende el cómputo del tiempo de la garantía.
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